13 de marzo de 2023
Y derrepente estaba ahí sumida en un deseo increíblemente grande de transmitir mis nuevos conocimientos espirituales para la vida y pensaba en ideas súper locas de como compartir con las personas que se sentían solas y vacías, intercambiar, entregar y escuchar y mostrar como hacer cesar el sufrimiento y crecer juntos. Pero los tiempos se pusieron turbulentos y entonces no sé en qué momento ya no estaba meditando a diario y los nuevos desafíos que me planteó la vida me consumieron en cuerpo y alma.
18 de marzo de 2023
Construir una vida en armonía en la que convivan las responsabilidades y demandas a las que estamos expuestas las mujeres que vivimos solas con nuestros hijos. Ser madres, atender a las necesidades básicas de los niños y niñas, las que comprometimos con el colegio, participar de sus actividades, vida social y lo más importante estar para ellos en su contención emocional; realizar bien y de manera eficiente las gestiones del hogar, mantención, administración financiera, compras – bendito Cornershop– y coordinar los quehaceres, comidas y colaciones diarias; cumplir con las obligaciones de hija de dos viejitos con Alzheimer que afortunadamente viven juntos en un buen lugar donde reciben los cuidados que necesitan – pero siempre hay que disponer del tiempo para acompañarlos, proveerles de su remedios, pañales, artículos de aseo y de otros servicios eventuales antes urgencias, etc.; trabajar 45 horas a la semana, sin mencionar las horas de traslados a todos lados y además conseguir tiempo para hacer vida de pareja, de familia, ver series, salir de paseo, de vacaciones de shopping y finalmente tener tu propio tiempo.
Sé que muchas mujeres cuando lean este texto pensarán ¿porque no inició el listado con sus propias necesidades? y claro yo también me lo cuestiono, pero soy de esos seres que siempre ve la necesidad en el otro y que la vida se encarga de proveerle lo que necesita….pero hay periodos en que la vida no se da así y tengo que tomar acciones.
Y aunque parecía imposible, yo había logrado esa armonía, podía manejar todo como el mago, la carta I del Tarot, el tiempo estaba ahí para mí y para todos y todo, lectura, escritura, música, meditación y todo lo que me llena …hasta que la salud faltó!
Y no importa a quien le falte la salud, si es uno de los tuyos, todo el sistema se afecta. Y el amor que es lo que me mueve, me llevó a abrazar este nuevo desafío.
Y en ese periodo, no pude escribir ni en una servilleta, todo lo que estaba viviendo era tan personal y tan familiar que me cerré otra vez como chanchito de tierra.
Pero por suerte la vida es cíclica y en este ir y venir parece que ya dejé de bajar en una de mis dimensiones y estoy recuperando tiempo y espacios aunque me siento cansada como nunca.
Pero tengo un proyecto, no abandonarme ni abandonar la vida que me completa, lo espiritual, las reflexiones, las enseñanzas, mi vida con Luis, la música y por sobre todo la locura alegre que me y nos caracteriza a todos en nuestra familia y en esa senda encontrar la libertad que parece tan esquiva en algunos pasajes de esta vida.
La libertad que está en lo más profundo de cada uno de nosotros. Así es que tomé la decisión de inscribirme en un curso de instructores de Kundalini Yoga en @dunia.yoga y ya cuando di la entrevista y me aceptaron e hice todo el trámite de inscripción, la música que escuché en mi cabeza fue: Blow Away -2004 Remaster – George Harrison.